tag:blogger.com,1999:blog-4010068642928083332.post6038342647328707786..comments2022-03-29T09:43:00.014-03:00Comments on .: DERECHOUnknownnoreply@blogger.comBlogger2125tag:blogger.com,1999:blog-4010068642928083332.post-37476579390062871662006-12-14T17:36:00.000-03:002006-12-14T17:36:00.000-03:00Agradezco los comentarios de Ricardo Fava. Recuer...Agradezco los comentarios de Ricardo Fava. Recuerdo, que La ChichaRRa Viajera Nº 4 –nov-2002-, cerca aún de la gesta popular de diciembre-2001; publicó un artículo 1. dónde preguntábamos a los lectores si pensaban posible una refundación Patria, basada en el olvido, la mentira y la impunidad? .<br />Proponíamos también ejercitar y construir nuestra memoria colectiva.<br />Dice bien Ricardo Fava: A nivel general, la sociedad argentina ha vinculado la idea de democracia con la posibilidad de hacer justicia respecto de los crímenes de la dictadura. En la nota citada decíamos, la memoria colectiva empieza a parecer como un camino pendiente, junto a la verdad y la justicia. Comenzamos a pedirle cuentas a nuestra democracia 2. <br />Ello demuestra que no es lineal la idea democracia=justicia. Es más, ha debido transcurrir 23 años –o más-, para que comiencen algunos juicios a los genocidas, y se dicten algunas condenas. <br />Quiénes vieron la película Botín de guerra, seguramente recordarán el testimonio de – al menos- dos Abuelas de Plaza de Mayo, en sentido de verse defraudadas por los gobernantes de la democracia, pues hasta fines de la década del 90, aquellas no habían tenido respuesta alguna, por parte de quiénes habían sido elegidos por el pueblo.<br />Por ello proponíamos –y proponemos- a quiénes nos leen, pensar en la construcción de la memoria como un ejercicio permanente, y en la memoria misma como un campo de batalla 3. <br />Otra reflexión crucial de Fava: Personalmente no acuerdo con una identificación esencial entre recuerdo y justicia, pero es cierto que en el caso argentino -que hizo de la desaparición forzada de personas el instrumento clave del terrorismo de estado-, esto ha sido lo que estuvo en juego. <br />Para pensar: nosotros creemos que lo contrario del olvido, no es la memoria. Sino la justicia 4. O por lo menos, en el plano cultural, memoria y justicia quedan identificados.<br />Citando a Schmucler, también propusimos la idea que la memoria es un hecho moral, y tiene sentido en medida en que esté presente de manera constante en nuestra vida cotidiana 5. <br /><br />Héctor H.Boleso<br /><br />Algunas reflexiones sobre el fallo en el caso Simón, pueden hallarse en Boleso, Héctor Hugo (2006), Derechos Humanos y Corte Suprema de Justicia de la Nación, Equipo Federal del Trabajo, Año I, Revista nº 11, págs. 3 a 22, www.eft.org.ar<br /><br />1. Por la construcción de la memoria colectiva, La ChichaRRa Viajera nº 4. <br />2. ídem.<br />3. Forster, Ricardo: La memoria como campo de batalla, Revista Puentes nº 8, nov-2002, páginas 14-17. <br />4. La idea es de Yerushalmi, quién se pregunta: ¿es posible que el antónimo de “el olvido” no sea “la memoria” sino la justicia?, citado por Jelin, Elizabeth: La política de la memoria, Revista Puentes nº 4, jul-2001, páginas 72-91.<br />5. Por la construcción de la memoria colectiva, La ChichaRRa Viajera nº 4. Schmucler, Héctor: Una ética de la memoria, Revista Puentes nº 2, dic-200, páginas 40-44.HECTOR H. BOLESOhttps://www.blogger.com/profile/02398300655813351396noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-4010068642928083332.post-6772061834543432006-12-12T12:13:00.000-03:002006-12-12T12:13:00.000-03:00Comparto la exposición de Héctor Boleso de los dil...Comparto la exposición de Héctor Boleso de los dilemas éticos y jurídicos que se le plantean a una sociedad que quiere dar cuenta de un pasado de terrorismo de estado. A nivel general, la sociedad argentina ha vinculado la idea de democracia con la posibilidad de hacer justicia respecto de los crímenes de la dictadura. Y frecuentemente en la capacidad de no caer en la impunidad se ha jugado la propia legitimidad del sistema democrático, invirtiendo el clima de los ochenta donde la mayoría de los expertos igualaban juicios con peligros y desestabilización. <br />Personalmente no acuerdo con una identificación esencial entre recuerdo y justicia, pero es cierto que en el caso argentino -que hizo de la desaparición forzada de personas el instrumento clave del terrorismo de estado-, esto ha sido lo que estuvo en juego. Aquí, ya desde los primeros años de la transición, dos son los modelos que se enfrentan sin posibilidades de combinación: quienes proponen olvido y reconciliación son los que pretenden también eludir la responsabilidad por esos gravísimos crímenes o hablan de amnistías, quienes consideran que no se puede construir una sociedad democrática bajo la sombra de los centros clandestinos de detención, la tortura y las desapariciones, hablaremos de memoria, verdad y justicia. <br />Para quienes quieran profundizar en el tema recomiendo el siguiente blog, una bitácora del juicio al represor Julio Simón, caso también mencionado en el texto: www.memoria.cels.org.ar/Anonymousnoreply@blogger.com